jueves, 22 de noviembre de 2007

Nunca fueron buenas las segundas partes...

Ésta sí =P.

Rostro de vos

Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.

Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto
y por sabor.

Sin temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos.

Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna
maldición.

Mis huéspedes concurren
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor
yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.

Pero el rostro de vos
mira a otra parte
con sus ojos de amor
que ya no aman
como víveres
que buscan su hambre
miran y miran
y apagan mi jornada.

Las paredes se van
queda la noche
las nostalgias se van
no queda nada.

Ya mi rostro de vos
cierra los ojos
y es una soledad
tan desolada.

Mario Benedetti

Es precioso… me lo dedicó una de mis mayores debilidades, Isaac, a quien amo… Me encanta su voz, cuando ríe parece que me abraza, y si alguno de los que leéis el blog, no ha sentido nunca la sensación, decir que es placentera, es poco…

Desde aquí, quería darte las gracias, cielo, por todas esas cosas bonitas que dices de mí, por preocuparte por mí, animarme, darme todo lo que quiero. Gracias por ser tan agradable, cariñoso, atento… gracias por amarme por encima de muchas cosas, gracias por abrirte a mí cuando eras un trozo de mármol (=P) y confesarme cosas inconfesables. Gracias por hacer que mis momentos difíciles sean momentos fáciles. Gracias por ser como eres y aceptarme como soy, por hacer que me confiese, por hacer que mis tardes sean amenas. Gracias por dejarme hacer todos esos comentarios jocosos, sarcásticos, irónicos, de humor bastante negro y no molestarte.

Gracias por presentarme a Nohelia, chica que fue mi principal dolor de cabeza en agosto (=P), chica que me encanta, con la que disfruto hablando, a la que me gusta escuchar decir todo lo que me cuenta.

Gracias, Isaac, por hacerme cambiar la percepción del mundo que ya tenía, por demostrarme que puedo ser mejor. ¡Gracias por todo! ¡Te quiero mucho!

1 comentario:

isaac sanmiguel dijo...

estaba revisando tus entradas antiguas,y me sorprendio mucho ver que no te habia respondido en esta, q va dedicada a mi...no recordaba que fuera tan importante en tu corazon cariño, pero me alegra saberlo de nuevo...te amo con el alma, tengo muchas cosas q contarte. estoy en un seminario de contrabajo en la capital toda la semana,y he estado errante y solitario como un lobo siberiano en las calles san cristobalenses jajaja...me he perdido varias veces camino a caa, y cometi el error de dejar mis libros en mi casa. conectate pronto, tu ausencia cibernetica me mata...