miércoles, 27 de junio de 2007

Fin de curso definitivo...

Ahora sí puedo dar el curso por acabado. Me deshice de todas las responsabilidades del curso 2006-2007 y tengo que confesar que, después de las notas que tengo, me merezco unas vacaciones. Está bien, quizás podrían ser mejores, sobre todo en la parte de ciencias teniendo en cuenta que quiero hacer física, pero creo que están bastante bien: cinco sobresalientes (inglés, educación física, alternativa, filosofía y psicología), tres notables (valenciano, castellano y física y química) y dos suficientes (matemáticas y biología y geología).

Fui ayer a por las notas, y me despedí definitivamente de mi tutora, que se va el año que viene al instituto de Cheste. Habíamos quedado para almorzar juntas mi compañera de mesa, mi tutora y yo, pero no pudo ser porque a ella le pusieron la reunión de departamento. En fin, que todo quedó en una despedida entre lágrimas.

Además, nos dieron una mala noticia. Somos muy pocos alumnos y no saben si va a haber línea en valenciano. No pienso aceptarlo, es vergonzoso. El año pasado ya los padres ganaron la batalla contra la Conselleria d’Educació, pero este año será más complicado… una cosa está clara: sea donde sea, pero yo estudio segundo de bachillerato en valenciano. Si hace falta me voy a un instituto de la capital (¡por favor el Lluís Vives, por favor el Lluís Vives…!), pero por un año que me queda de bachiller y que voy a hacer la carrera en valenciano también… es que me parece una vergüenza que quieran quitar la línea… El caso es que creo que el curso 207-2008 será muy especial… esperemos que en mi ciudad…

Anteayer me fui a la piscina, pero no hay mucho que comentar salvo que hacía demasiado calor para mi gusto, que Bego sigue siendo genial y que el socorrista estaba bastante bueno… este año, además, era guapo (el del año era un abuelete y hace dos años estaba bueno pero era feo…), oye, ya que era el único chico que había “adecuado de edad” para mí, ¡que estuviera bien era un gustazo…! ¡¡Jajaja!!

Y, cuando volvimos del Devesa Garden, pasamos por la tienda de fotografía y rebelé algunas de las fotos de mi móvil (dos me hacían falta, las otras doce no…), entre ellas las de las fiestas de Orba (con Lucas, Vicente, mis primos, con los cantantes de La Tribu, con Raquel, con Vicente Javier o con Ángela, entre otros…), con mi mejor amiga, la de mi padre con mi prima, una mía en la que dicen que salgo bien…

Y ayer creé otro escritorio virtual, están geniales, son interesantes y te permiten subir lo que quieras sin esfuerzo. Esta vez subiré unas fotos de Randy Harrison para una de las usuarias del foro de “Queer As Folk” a la que tanto le gusta (¡¡el mío es Gale Harold!!).

Nada más, ¡¡hasta el próximo post!!

domingo, 24 de junio de 2007

Tampoco fue tan terrible...

Y yo que creía que iba a ser mejor… no, no lo fue, pero tampoco fue un trauma insuperable. Íbamos con mis padres, es normal. No es que me moleste ir con ellos, para nada, siempre tengo que reconocer que a más de uno y una le gustaría tener los padres que yo tengo, pero anoche sentí como que sus cadenas me agobiaban. Sin más.


Puede que porque amo aquello y después de cuatro años sin pisar el pueblecito necesitaba explayarme y más libertad de la que tuve. Puede ser. Y es que ayer por la noche volví a pasear, por fin, por las calles donde pasé todos mis veranos hasta que tuve doce años, como dije en el anterior post.


Todos seguía donde yo lo recordaba, bueno, todo, todo, no, la verdad… Han cambiado muchas cosas (locales cerrados, otros nuevos abiertos, cambios de lugar, ¡hay ayuntamiento por fin!, etc.), pero la esencia sigue siendo la misma… el mismo olor a salitre en el aire, ¡la misma gente, Dios mío! Mis amigos… siguen yendo a veranear allí… y ayer yo hice una promesa mirando al mar y sintiéndome convencida: sea con quien sea, como sea, cuando sea, en la casa que sea, cuantos días sean… pero yo un verano vuelvo, está clarísimo.


Finalmente nada de tradiciones, ya fui yo bastante de olvidar mis malos momentos y quedarme solamente con los buenos en la memoria. Ni siquiera me llevé papel y boli, como dije que haría… se me olvidó. Deliberadamente o no. El caso es que cenamos sentados en la arena, como en los viejos tiempos, sólo que esta vez lo hacíamos con mi mejor amiga, quien alucinaba por tanta emoción que yo manifestaba y viendo claramente a Júpiter con sus cuatro lunas más importantes y la constelación de la Osa Mayor más clara que nunca.


Pero sí hubo discoteca. Y muchos niñatos. Sí, a montones. ¡Qué horror! Está bien, no es que yo sea la más madura del mundo, pero sé controlarme sin hacer ni decir idioteces. Toda aquella masa de gente no. Las niñas te empujaban y los niños te tocaban el trasero… hubo desmayos por demasiada ingestión de alcohol y el humo de los porros hacía que se colocara el que lo estaba fumando y los de alrededor… un horror. Y por si había poco, se armó una bronca enorme y tuvimos que salir de la “pista de baile” porque los policías antidisturbios venían preparados con las porras en las manos… cualquiera se quedaba…


A parte, cuando ya nos íbamos (a la una y media o algo así), Iris llamó para decir que fuéramos a reunirnos con ella al bar. Muy bien, qué oportuna, ¡jeje! Pobre, al menos intentó varias veces que nos quedáramos. ¿Resultado? Ninguno, mis padres son implacables…


En fin, que por lo menos ligamos, que ya es algo. ¿Si aceptamos? No, por supuesto, delante de “adultos conocidos” y a riesgo de que me pudieran conocer, ¡cualquiera hacía algo…!



Y, por cierto, vi más maniseros de los que veo cuando estoy aquí. Quedé alucinada xD. Marcho allí a celebrar San Juan para no ver a nadie que conozca de la ciudad, y me encontré justo al grupo de amigos que no quería ver… Ais…


Pero no será el último San Juan, ¡pienso volver el año que viene!

P.D.1: No puedo creer todavía la suerte que tuve después de todo: ¡Vi a Toniko!

sábado, 23 de junio de 2007

Un día más...

Jamás llegué a imaginar que podría pasarlo bien en mi ciudad… De verdad, siempre pensé que la capital era lo mejor. Ahora creo que me equivocaba. Adoro la capital, pero esto es tan “familiar” que duele coger el metro e irse al centro de Valencia.

Y es todo tan simple como ayer por la noche: una buena compañía (mi mejor amiga y las chicas del grupo), un simple bocata, un parque cerca de mi falla donde poder sentarse a cenar, muchas calles por las que pasear además de una nueva y bonita avenida… y sobre todo kilos y kilos de diversión. Nunca pensé que todo iría así de bien. Porque somos un poco reacias todavía a salir de noche por la ciudad (si habláramos de la capital, sería otra historia).

Hicimos el loco tanto como pudimos en cuatro horas. Ellas, además, venían de la piscina, lugar al que yo esa tarde no pude ir… (¡Já! Pero el lunes, cuidado Devesa Garden, ¡que voy! xD) y seguro que las risas estuvieron aseguradas. Me muero de la envidia, con el calor que hacía en mi casa a esas horas… bueno, en la Comunitat en general… No sé cómo el sol no derrite el asfalto o el techo de los aviones que aterrizan en el aeropuerto… es insoportable, quien me discuta que en otros sitios hace más calor, lleva totalmente las de perder.

El caso es que recorrimos los rincones más recónditos de Manises. Sabíamos que no había nada que no hubiéramos descubierto ya, pero aún así, nos apetecía pasear. Y, aquellos que nos vieran estoy más que segura de que dirán: 1) que de qué centro psiquiátrico nos hemos escapado, 2) que somos lesbianas. ¡¡Para nada!! Mi madre dice que si fuera un hombre sería gay, así que parece que me gustan los hombres, ¿no? xD Pero es que la de ayer fue una noche de “toqueteos”. Creo que nunca me han “achuchado” de tal manera tantas mujeres juntas, ¡jaja! Encima decían que no eran peligrosas… ¡pues menos mal!

Y esta madrugada son las hogueras. Todo el año deseando esta noche para que al final todo quede en una excursión con mis padres y Tamara al Perelló. Esperaba una buena fiesta junto a Nacho, del que hace muchísimo tiempo que no sé nada. Espero que no le pase nada… Pero bueno, menos es nada, así que tendré que conformarme. La verdad es que voy a aprovechar la oportunidad, a recorrer el sitio donde veraneé durante doce preciosos veranos. Voy a perderme entre sus calles, quiero ver qué ha cambiado… Me emociona volver allí, saber que igual están aquellos amigos que durante doce años tuve, que durante doce años compartieron más que un verano conmigo. Tengo ganas de que Tamara conozca aquello. Y por supuesto no voy a rechazar la oferta de Iris de llamarla y quedar con ella y sus amigas, aunque ellas están por Mareny intentaré que vengan.

¡¡Ya veremos cómo acaba la noche!! ¿Qué hago, sigo la tradición y anoto en un papelito lo que quiero quemar o dejo la tradición en paz y pienso que al fin y al cabo es una idiotez? No lo sé, ya veremos. Al menos, lo que puedo hacer es llevarme papel y un boli por si acaso me da la locura de seguir las costumbres en el último momento y participo. Lo que tengo muy claro es que ¡no voy a meterme en el agua! xD

A todos aquellos que celebran esta noche como Dios manda, ¡¡deshaceos de los malos momentos, quedaos sólo con los buenos y, por encima de todo, quered a alguien y disfrutad del momento! (¡¡Carpe Diem!!)


Hasta el próximo post.

viernes, 22 de junio de 2007

Mis comienzos... de nuevo

Sí, los comienzos son duros, o al menos eso dicen. Lo cierto es que no se equivocan pese a que mis comienzos hayan sido dobles.


Abandoné mi antiguo blog por razones que nunca me he planteado saber. Quizás porque la constancia puede conmigo, quizás porque soy un poco torpe en eso de mantener y crear cosas... En fin, que aquel blog se acabó. Aunque sigue en activo, (¿o debería decir en "pasivo"?), ya no posteo allí, sin embargo si a alguien le hace ilusión dejar allí un comentario... no me hacen pagar por dar mi antigua dirección, así que... AQUÍ LO DEJO

Para aquellos que no me conocen, decir que soy una valenciana algo inquieta e impaciente pero maja y con ganas de divertirse muchísimo. Dispuesta siempre a echar una mano ¡y a que me la echen...!, a partir de ahora, aquí postearé siempre que pueda, siempre que me sea posible, para compartir tanto con aquellos que me conocen bien como con aquellos que no me conocen de nada y que sólo pasaban por aquí, todos aquellos momentos, (buenos y malos), que sean dignos del recuerdo.


Bienvenidos a mi mundo,


¡un saludo!


Piru.