Entre la realidad y la ficción...

...Hay un puente sumamente pequeño. Ese puente que las une existe solamente en nuestras mentes. ¿Por qué lloramos al ver una escena de una película o una serie si sabemos que no es real? Entre vosotros y yo: ni idea.

Los humanos tendemos a comparar situaciones, tendemos a empatizar en cierto modo con caracteres que ni siquiera son un prototipo realista de cómo somos las personas verdaderamente. Yo, que como ya sabéis soy una sentimental, he llorado mucho al largo de mi vida tan sólo viendo una simple película o serie de televisión y es que los seres humanos logramos meternos en la piel de otros, de unos personajes de ficción que tomamos como patrones de lo que nos gustaría ser, en mucho casos.

En mi vida ha habido grandes momentos que he compartido con esos alguien con quienes ni mucho menos puedo comunicarme: Fueron Tony y Maria en "West Side Story", fue Dallas en "Rebeldes", fue David en "Inteligencia Artificial", fue Danny en "Anatomía de Grey", fue Leo en "Embrujadas", fue Angel en "Buffy", fue John en "Rebelde sin causa", fueron ¡todos! en "Queer as Folk", y ahora ¡todos! en "Kyle XY". Y de este show venía a hablaros yo.

Primero os lo presento. Todo comienza a las afueras de Seattle. En medio de un bosque aparece un chico que aparentemente no posee ningún recuerdo de su pasado. Al no saber dónde llevarlo, la policía –que lo encuentra desnudo y con una sustancia viscosa por todo su cuerpo– lo envía a una residencia juvenil, donde recibe el nombre de Kyle. Allí descubren que no ingiere comida, no se relaciona con la gente, no manifiesta ningún sentimiento y, lo más curioso de todo, no posee ombligo.

Ante la extrañeza del caso, el administrador del centro llama a la psicóloga Nicole Trager, quien decide llevárselo por un tiempo a vivir con ella y su familia. Pero la noticia no es recibida con agrado en casa de Nicole. Mientras su marido Stephen (Bruce Thomas, Sensación de vivir) cree que esta decisión puede afectar emocionalmente a Nicole, sus hijos, Lori (April Matson, Quintillizos) y Josh (Jean-Luc Bilodeau), no están dispuestos a ser el hazmerreír de sus amigos.

En realidad quería hablaros de una parte de él.

Ésta es Andy, una amiga de Josh, quien a su vez es hermano de Kyle y de Lori, quienes son hijos de Nicole y Steven.

AVISO MUY IMPORTANTE: A PARTIR DE AQUÍ, SPOILERS DE LA SERIE SEGUIDA A RITMO DE cuatroº.

Preciosa, ¿verdad? Vamos, ¿qué me decís de ella? ¿Nada, me toca confesar a mí? Pues sí, es maravillosa. Es la chica que me hace sentir, llorar, reír, saber, experimentar. Tiene cáncer. Lloré tanto el día que lo dijo, que me quedé dormida del agotamiento. Cursi redomada, ¿eh? Pues sí. No sé quién es la actriz, no sé por qué es con quien más empatizo de la serie, no sé por qué siento como si compartiera todo conmigo cuando ni tan sólo existe. Parece que me apoye, me aconseje y me comprenda, por ella lloré a mares, fue por ella que todos los recuerdos dolorosos sobre el cáncer volvieron a mi mente... Sí, he vuelto a pensar en ello.

AVISO SPOILERS DE LA SERIE "QUEER AS FOLK", COMPLETA.

Brian también pasó por uno, así que ya no es original, pero aquí estoy, sentada frente al ordenador llorando internamente como una tonta por algo que afortunadamente no sufro, pero que a su vez llevo dentro toda la vida: la incomprensión de la enfermedad más cruel y temida tras el SIDA actualmente: el cáncer.

En fin, para resumir. La vida es un asco, estamos mal diseñados. Deberíamos saber a la perfección cuándo estamos soñando o en un mundo alternativo y cuándo no, sin embargo, fijaos en cómo nos conmueve pensar que a nuestros personajes favoritos de nuestras series favoritas les va a pasar algo... Chicas Queer, ¿aterrorizadas por si Justin no va a volver...? ¿Ya me entendéis? Largo día de instituto, cansancio emocional, ideas poco claras, Carpe Diem...

Un beso, ¡¡hasta el próximo post!!

El Socarrat y José...

Día tercero de mi diario de sueños.

Este sueño es el más extraño de todos porque en ningún momento me acordé ni dije nada de quienes voy a hablar ahora. El Socarrat es el pueblo donde veraneaba hace ya unos cuantos años. Luego empecé a ir de viaje en verano y dejamos de alquilar el apartamento donde solíamos vivir esos tres meses. Vivíamos a una manzana de la playa. Era un placer sentir el olor a salitre y el sonido de las olas rompiendo contra la arena.

El caso es que allí tenía dos mejores amigos, Carlos y José, y este último fue con quien soñé, no preguntéis por qué.

Bueno, yo llegaba al pueblo donde veraneábamos y me encontraba con parte de su familia (sus tías y primas), pero vivían en una casa distinta a la real. Paso de largo pero las reconozco y me paro, y digo hola. Ellas me saludan por cortesía, porque no me reconocen. Me paro enfrente de ellas y les digo: "¿Sabéis quién soy? ¿Os acordáis de mí?". Entonces ellas afirman con la cabeza y exclaman: "¡Esther! ¡Cuánto tiempo! ¿Cómo estás? ¿Cómo que estás aquí?".

- Pues nada, he venido a ver cómo ha cambiado esto. Hacía unos cuatro años que no venía por aquí... Quería... no sé, echaba de menos esto.
- Qué alegría verte, no te despediste definitivamente la última vez que viniste.
- Lo sé, pero no sabía que no iba a volver... Bueno, me voy para allá, quiero ver a José.

Me sonrieron, dijeron hasta luego y me fui. Llegué a la puerta de su casa y abrí. Su madre estaba sentada de espaldas. Me puse enfrente de ella y hablé.
- Hola...
- Hola -me miró extrañada.
- ¿Sabes quién soy?
Afirmó con la cabeza y le tembló la barbilla. Se levantó, me abrazó y se puso a llorar.

- Madre mía, cuánto tiempo, cómo has crecido, qué grande estás...
- Echaba de menos el pueblo...
- Te entiendo...
- ¿Y José?
- Está dentro, con su hermana y su padre. ¿Has visto a mis sobrinas?
- Sí, me he parado a hablar con ellas.
- ¿Quieres que lo llame?
- ¿Puedo entrar yo? -pregunté tímida.

Afirmó con la cabeza, y cuando iba a abrir la puerta, salió Sandra, la hermana de José, que se quedó realmente anonadada cuando me vio. Me abrazó emocionada y se puso a dar saltos (cuando en la realidad no nos llevábamos...). Le pedí que por favor bajara la voz, que quería darle una sorpresa a su hermano. Entré en la casa y allí estaba, sentado en el sofá. Se incorporó en cuanto me vio. Sólo le oí decir "Joder". Sonreí.

- Veo que me reconoces.
- ¡Vaya si lo hago! -se levantó del sofá y vino hacia mí-. Cierra, por favor.
Cerré la puerta tras de mí.
- ¿Qué haces aquí?
- Creí que te alegrarías de verme.
- ¡Sí!
- Oye, José...
- Dime.
- No sé por qué he venido aquí, podría haber ido a ver a Alicia o a Carlos, pero he venido aquí. Os echo a todos muchísimo de menos...
- Pero has venido a verme a mí...
- Exacto.

Fuimos acercándonos poco a poco, hasta quedar uno frente al otro. Quise hablar pero él puso su dedo índice en mis labios, callándome.
- ¿Por qué ahora? Quiero decir, ¿por qué después de casi cinco años?
- Porque ambos hemos crecido...
- Pero no vivimos en la misma ciudad...
- Lo sé...

Me dio un beso casi inexistente.
- No digas más.
Nos besamos. Tras unos largos segundos besándonos, sonó mi despertador...

Aunque me repita: ¡Auxilio, mis sueños no son normales!

A 30 días de Navidad...

Y yo pensando en estas cosas... en ella, en él... en Bea y en Roberto... Todo por culpa tuya, Pibe... por estar tan melancólico en tu blog...

En fin... a 30 días de Navidad, y sin ilusión este año, como si fuera un día más, un día cualquiera. Nunca lo fue, Navidad siempre ha sido un día especial, de juntarse en casa con la familia, de disfrutar de esas pequeñas que me vuelven loca (mis primitas, Beatriz y Laura Mei Yu), de compartir mensajes cargados de amor entre los amigos, de hacer la típica llamada chorra pero que al fin y al cabo aunque no quieras reconocerlo te alegra el día porque ha venido de parte de esa persona que nunca imaginabas que iba a llamar.

No... este año no es así... Quizás... Si no cambian las cosas, todo seguirá como hasta ahora, sin prácticamente ilusión, porque, a fin de cuentas... ¿Qué es Navidad sino un buen invento de El Corte Inglés, que diría Melendi? De todos modos, hay alguien que me ilusiona, alguien que me hace estar feliz porque nos curramos cada día nuestra amistad, alguien que no me fallaría... No es solamente una persona, sois muchos los que colaboráis a que poco a poco, esa cuenta atrás hasta que llegue El Día, sea menos pesada, se me haga más llevadera, porque después de todo, la esperanza es lo último que se pierde, y yo no voy a ser menos que nadie, y menos teniéndoos a vosotros a mi lado.

Hagamos entre todos algo porque la Navidad no sea solamente una fecha para alumnos y profesores bonita sólo porque llegan las vacaciones y podemos descansar. Ahora sí, sin más preámbulos, os dejo mi sueño.

Un beso. ¡¡Hasta el próximo post!!

Nunca fueron buenas las segundas partes...

Ésta sí =P.

Rostro de vos

Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón.

Tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto
y por sabor.

Sin temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos.

Estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna
maldición.

Mis huéspedes concurren
concurren como sueños
con sus rencores nuevos
su falta de candor
yo les pongo una escoba
tras la puerta
porque quiero estar solo
con mi rostro de vos.

Pero el rostro de vos
mira a otra parte
con sus ojos de amor
que ya no aman
como víveres
que buscan su hambre
miran y miran
y apagan mi jornada.

Las paredes se van
queda la noche
las nostalgias se van
no queda nada.

Ya mi rostro de vos
cierra los ojos
y es una soledad
tan desolada.

Mario Benedetti

Es precioso… me lo dedicó una de mis mayores debilidades, Isaac, a quien amo… Me encanta su voz, cuando ríe parece que me abraza, y si alguno de los que leéis el blog, no ha sentido nunca la sensación, decir que es placentera, es poco…

Desde aquí, quería darte las gracias, cielo, por todas esas cosas bonitas que dices de mí, por preocuparte por mí, animarme, darme todo lo que quiero. Gracias por ser tan agradable, cariñoso, atento… gracias por amarme por encima de muchas cosas, gracias por abrirte a mí cuando eras un trozo de mármol (=P) y confesarme cosas inconfesables. Gracias por hacer que mis momentos difíciles sean momentos fáciles. Gracias por ser como eres y aceptarme como soy, por hacer que me confiese, por hacer que mis tardes sean amenas. Gracias por dejarme hacer todos esos comentarios jocosos, sarcásticos, irónicos, de humor bastante negro y no molestarte.

Gracias por presentarme a Nohelia, chica que fue mi principal dolor de cabeza en agosto (=P), chica que me encanta, con la que disfruto hablando, a la que me gusta escuchar decir todo lo que me cuenta.

Gracias, Isaac, por hacerme cambiar la percepción del mundo que ya tenía, por demostrarme que puedo ser mejor. ¡Gracias por todo! ¡Te quiero mucho!

Viaje inesperado a Londres...

Día segundo de mi diario de sueños.

La verdad es que este sueño es bastante (por no decir mucho) raro. Va por fases. Cuando acaba una, se corta (hay un hueco en negro) y empieza otra. Muy extraño. A ver.

Empieza con dos personas hablando, Kate (una chica que vino a dar clases de conversación de inglés a mi instituto) y yo. Estábamos aquí en España, pero no recuerdo de qué hablábamos... De repente, todo negro.

Ahora estábamos en Londres, sin Kate. Estaba en un local oscuro, era un bajo, parecía un comercio, había estanterías con teléfonos móviles, y yo estaba con dos chicos ingleses, monísimos, muy guapos, la verdad, y con Ester G., (una compañera mía de la Escuela Oficial de Idiomas). Lo único que recuerdo de la conversación que tuvimos es que yo le decía: "¿Qué hacemos aquí?". Ella se encogía de hombros y decía: "No sé, nos han traído X e Y, pero tú pilla todos los móviles que quieras...". ¡Íbamos a robar! Los chicos nos dejan solas y se meten en dos cuartos, en los baños. Otro corte.

Y por último, en algún sitio de la costa mediterránea española. Estaba en una playa, había tumbonas y dos chicos tumbados en ellas. Iban en bañador (de los de slip) y yo llevaba un bikini. Ellos estaban tomando el sol pero yo acababa de salir del agua, estaba empapada. Me puse encima de uno de ellos: ¡era Eneko de Gran Hermano! Y a mi lado, estaba Piero. Yo besaba a Eneko, que se estremecía al sentir el contacto de mi cuerpo mojado contra el suyo seco. Piero decía algo y yo le contestaba. Otro momento de oscuridad, y fin del sueño.

Un beso. ¡¡Hasta el próximo post!!

Un corazón frágil...

Éste es el primer capítulo de la maravillosa obra de un amigo mío (Manu). Iré colgando a medida que me vaya pasando. Espero que os guste. ¡¡Opinad, queremos críticas constructivas buenas y malas!!

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Un corazón frágil.

Esto va dedicado a mis amigos que de mejor o peor forma, siempre han confiado en mí, en mis creaciones y en mis personajes, mil gracias a todos.

Sinopsis

Un grupo de “jóvenes” se conocen, entre ellos empiezan a surgir dudas, amores, traiciones, celos, descubrirán que nada es lo que parece, pero después de todo se darán cuenta de que la amistad si es importante.

Capitulo 1: La nueva vida.

El cielo estaba totalmente anaranjado, corría una suave brisa por la playa, que estaba totalmente desierta, Ana estaba viendo de nuevo el atardecer sola, estaba sentada, se puso a pensar y se tumbo en la arena para ver otro atardecer más.

Mientras tanto Andrés, estaba tumbado en su habitación o en lo poco que quedaba de ella ya que tenía todo recogido en cajas y maletas debido a su cambio de ciudad por el nuevo empleo de sus padres.

La madre de Andrés subió a su cuarto y ella estaba algo nerviosa, no sabia como hablar con su hijo, ya que el no estaba demasiado contento, llamo a la puerta del cuarto del hijo que estaba cerrada

Madre Andrés: ¿se puede?

Andrés: claro que se puede...Entra, entra.

Le dijo con algo de ironía.

La madre entro y se sentó en un borde de la cama y cuando fue a hablarle a su hijo , este le dijo,

Andrés: ahórrate el rollo de que ya tendré nuevos amigos, y que mis amigos de aquí me esperaran siempre, porque sabes que es mentira, bueno si tendré la oportunidad de empezar de cero, yo lo acepto, pero la próxima vez que cambiemos de ciudad avísame con 1 mes de antelación para organizar una despedida o algo, que me avisaste hace dos días que esta noche nos vamos de ciudad…

Madre Andrés: hijo yo no tenía esperado este cambio tan grande, pero es lo que hemos soñado tu padre y yo, ser el director y subdirectora de la empresa en la que hemos estado trabajando durante 10 años sin parar…

Andrés: ya lo se mama, pero no comprendes que yo tenía aquí mi vida, mis amigos….

Madre Andrés: bueno hijo, te lo recompensare de la forma que quieras….piensa en lo que quieras…

Andrés: vale, ahora me puedes dejar solo unos momentos...

Le dijo algo desanimado, la madre se levanto de la cama, le dio un beso en la frente y se fue cerrando con cuidado la puerta; Andrés siguió tumbado en la cama, se coloco el mp4 y empezó a escuchar música, mirando una foto de todos sus amigos juntos.

Sandra estaba delante del ordenador, intentando hablar con su novio Rufo, pero este no le hablaba así que enfada, apago el ordenador y se fue a cenar con los padres que la llamaban desesperadamente, para que bajara a cenar.

Mientras tanto Chico, se fue de la casa de Rufo con unos ejercicios de clase, en la puerta Chico le dijo a Rufo algo nervioso

Chico: bueno, supongo que pronto todo será distinto…

Rufo: si, ya nada será como antes y tu lo sabes…

Chico: pero tu sabes todo, toda la verdad…

Rufo: dejémoslo hay, ¿vale?

Chico: vale, cuando copie los apuntes y ejercicios, te traigo el cuaderno, adiós.

Rufo: adiós.

Seguido de ese “frío” adiós cerró la puerta y se sentó detrás de la puerta.

Por la calle caminaba Chico, iba escuchando sus propios pensamientos, se sentía solo, y en voz baja dijo,

Chico: ya tengo lo que quería…

Y entre el cuaderno tenia un CD que había cogido cautelosamente en casa de Rufo, miro el CD y lo volvió a meter entre las hojas del cuaderno y siguió hacia su casa.

Al día siguiente a las 12 de la mañana hacia un sol bastante pegajoso, Andrés estaba sudando bajaba del coche del padre una maleta donde estaba su ropa, y fue caminando hacia su “nueva vida” o ese eran sus pensamientos, que los tenia algo aturdidos, no había dormido esa noche, entro en su nueva casa, la puerta estaba abierta, la planta baja tenia algunos muebles, un poco desanimado subió unas escaleras de caracol, que daban a la segunda planta, la escalera tenia un color plateado que brillaba con el sol, cuando llego a la segunda planta, el padre le dijo animándolo

Padre de Andrés: ¡¡¡mira que habitación tienes!!!

Andrés algo borde le contesto;

Andrés: como si eso me importara, total ya nadie me pide opinión para nada…

Padre de Andrés: tu opinión si que importa hijo…

Andrés, entro en el cuarto y dio un portazo bastante fuerte, tiro encima de la cama que había aun por estrenar y le dio un puñetazo a la almohada.

Ana miro el reloj de la pared de su cuarto, marcaban la 13.05 horas, estaba algo aburrida, así que llamo a su amiga Sandra por el teléfono y esta le contesto a la llamada;

Sandra: dime Ana

Ana: ¿Qué haces? ¿Has quedado esta tarde?

Sandra: no… ¿por?

Ana: ¿te vienes a algún pub a tomar algo?

Sandra: tía… no se con el calor que hace…

Ana: bueno, ¿Qué te apetece hacer?

Ana se puso a pasear por la habitación mientras hablaba, se sentó en su silla, rosa y se asomo al balcón a ver a la gente…

Sandra: bueno voy contigo a tomar algo al pub, pero luego me ayudas a buscar algo para el regalo de Rufo, que dentro de poco es su cumpleaños…

Ana: ah ¿si?, no sabia que fuera su cumpleaños…

Sandra: si es dentro de poquito…

Ana: me parece buena idea, ¿Qué te parece a las 6 de la tarde en el paseo?

Sandra: vale…

Pero no había podido terminar que Ana dijo por teléfono…

Ana: ¡¡¡¡Dios!!!! Que tengo un nuevo vecino…. Y que bueno esta….

Sandra: ¿Qué dices Ana?

Ana: que tengo nuevo vecino, ¿como se llamara? ¿Tendrá novia?....

Sandra: puedes dejar las hormonas para luego, a las 6 en el paseo, me voy a almorzar que mi madre se pone histérica…

Ana: pues yo almorzare, hoy sola con mi madre, no se que pasa con mis padres, pero mi padre pasa últimamente mucho tiempo fuera de casa…

Sandra: no te preocupes, seguro que eso lo arreglan echando un buen polvete….

Ana: ¡¡¡Por dios, no digas esas cosas!!! Jejeje, bueno vete a comer, ¡¡¡que se oye a tu madre desde aquí!!!

Sandra: bye

Ana: bye.

Cuando entro la madre de Ana por la puerta, ya la mesa estaba puesta y se sentaron las dos a comer y luego se pusieron en el sofá a ver un rato la televisión.

Chico estaba mirando en su ordenador el contenido del CD, estaba totalmente asombrado, no podía creer lo que estaba viendo, lo veía una y otra vez.

Rufo, se sentía un poco culpable por haber tratado mal a su amigo y decidió enviarle un sms.

Mas tarde Ana se dirigía a la playa, necesitaba pensar un poco, cogió por una calle pequeña, pensaba que era la primera vez que cogía por allí, pero ya había cogido antes o eso le parecía a ella, siguió andando mientras escuchaba música en su mp3, de repente paso alguien de lejos y ella pensó que era su padre, así que empedo a andar mas rápido para ver si era su padre, llego a una casa que estaba en primera línea de playa, vio como un hombre entraba en una casa, se dirigió a un a ventana que se encontraba abierta, miro por ella y se quedo bastante desconcertada, su padre estaba en casa de una mujer, su padre engañaba a su madre, siguió mirando mientras que el padre y la amante se besaron y luego tuvieron una pequeña conversación.

Padre de Ana: estoy harto de mi vida…menos mal que te tengo a ti…

Amante: yo te quiero, pero no puedo seguir mas tiempo así, quiero que todo el mundo sepa lo nuestro…

Padre de Ana: pero yo ahora mismo, no puedo mi hija esta en una época muy difícil, no quiero derrumbarle toda su vida….

Amante: ya, pero también tiene edad de entender que no eres feliz con su madre y que no quieres estar amargado, seguro que ella si se lo explicas bien, lo entenderá…

Padre de Ana: bueno, lo hablare con ella, esta noche le pediré el divorcio a mi mujer, si aceptas ser mi esposa…

Ana no se creía lo que estaba escuchando, sin que nadie la escuchara, se fue corriendo a la playa que la tenia bastante cerca, mientras tanto la amante del padre de Ana le dio el si al padre, los dos emocionados se fueron al cuarto a celebrar la pedida de mano.

Mientras tanto, en la playa que estaba desierta, Ana se tumbo y se quedo mirando el cielo, mientras las lágrimas le caían desconsoladamente… detrás de ella llego un chico que se sentó al lado suyo y le dijo:

Andrés: ¿Por qué lloras?

Ana, que se sorprendió de verlo allí, le contesto

Ana: cosas personales…

Andrés: te comprendo… no haces falta que me digas nada ¿quieres aprender una técnica para quedarte desahogada?

Ana: dime…

Andrés la cogió de la mano, la levanto y la jalo hasta que los dos empezaron a correr y poco después le dijo Andrés...

Andrés: grita ahora….

Y Ana que le hizo lo que le dijo, empezó a gritar mientras los dos corrían por la orilla de la playa el grito era tan fuerte que a Ana se le erizaba el vello y seguía gritando, mientras los últimos rayos del sol se ponían.

No es amor, lo que yo siento se llama obsesión...

No puedo creerme que me esté pasando esto a mí. ¿Pero qué se cree, que puede hacer cualquier cosa sin mi permiso? ¿Quién le ha permitido volver a mi corazón y hacerme llorar así después de ocho meses desaparecido de mi vida? ¿Quién se crees que es, alguien especial? Pues aunque a mí me duela reconocerlo, sí. Mentiría si dijese que está todo olvidado, que desde Fallas no he pensado en él. Mentiría si lo acusara de ser un grandísimo cabrón. Porque capullo vale, ¿pero cabrón? De acuerdo, para alguien que lo ve desde fuera, Javi es un cabrón, y la verdad es que no lo diría sin razones…

Centrémonos en el jueves. Me pone de los nervios. Primero porque va de padrazo, y aunque lo parece porque con la niña está adorabilísimo, no es su padre ni nada, porque de momento no está casado con su novia. Y segundo porque, ¿de qué va? ¿Qué pretende? ¿Comprobar si sigo queriéndole? Le coge de la mano a su novia y me mira, cuando lo miro me aguanta la mirada, se hace el ofendido cuando no lo saludo, si la besa comprueba que me molesta, si cuando baila con ella hace un gesto sensual mira mi reacción, etc. Todo así. ¿Quién cojones se cree que es, Míster Universo? Y la cosa es que, como desde que sale con ella, soy más fría que un témpano, parece que le joda aún más. ¡Coño, tío! ¡Si parece que salgas con ella para darme celos! *pone cara de desesperación*.

Y encima, tener a Tamara a mi lado, no me ayuda, porque cada vez que me mira, me lo dice, y cuando hace algo que deba importarme, me lo cuenta. Y tonta del culo de mí, ¡quiero saberlo, después de todo! Porque si sale con esta chica para darme celos, ¡lo consigue, joder! Puede que no sea real, que yo me imagine todo lo que no me dice Tamara pero yo veo, puede que todavía siga queriéndole tanto que me esté volviendo loca, pero si es cierto y yo no me lo imagino, lejos de parecerme precioso, me resulta patético, sí, con todas sus letras.

Tampoco tiene derecho. No se puede hacer daño a alguien que no te ha hecho nada a ti, coño. No jorobes. Es cruel hacer eso. Y que yo sepa, no he dicho ni he hecho nada que pueda ofenderlo como para que ahora vuelva a mi vida y entre haciéndome llorar como una imbécil. Muy al contrario, nunca he sabido ver sus defectos y he realzado siempre, fervorosamente, sus virtudes. Me da miedo que siga partiéndome el corazón y que a partir de ahora no sepa cómo recomponerlo, porque para los que nunca se lo han roto, no tienen ni idea de lo doloroso que puede llegar a ser. Mi propósito es dejar de pensar en él. Da igual qué tenga que hacer con tal de olvidarme de la preciosa cara que tiene.

Dejando y no dejando este tema aparte porque voy a seguir hablando de mi falla y de falleros. Anteayer fue un día de descubrir cosas: que hay falleros nuevos y que no queda casi nadie en mi falla. Vaya asco. Somos la mitad de los que éramos el año pasado. ¿Y los play-backs? Menuda chapuza, son todos más sosos… La verdad es que me lo pasé bien, porque ver a los chicos que bailaron (Chiki, Sento, Miguelín, Periles y Javi) vestidos de tía en plan cómico y bailando (o parodiando, más bien) el “Pure Intuition” de Shakira, era para descojonarse. ¿Lo mejor de la noche? Ver a Toni con cara de que casi le da un infarto (no es que sea malvada, es que si lo cuento por aquí no tiene ni puñetera gracia, eso era para verlo en directo…).

Y la presentación de ayer fue muy graciosa y emocionante. Mi madre me hizo llorar con la poesía que le leyó (y escribió, por supuesto. ¿De dónde os creéis que he sacado yo el don, de debajo de una piedra? Pues no, de mi mami) a Yaiza. Además, yo llevaba con ganas de llorar desde que entramos al cine, porque me emociona mucho ver que la Fallerita Mayor es una de mis chiquitinas y yo quiero mucho a toda su familia. Por otro lado, el marzo del año que viene hará seis años que yo fui Fallera Mayor Infantil y quieras que no, te acuerdas y dices “jo, quiero volver a serlo…”.

En fin, abandono este tema ya. Al final, el día siete me llevé una sorpresa enorme, que es lo que querían mis padres. Me han remodelado la habitación como regalo de cumple. Está preciosa, la amo, ¡jaja! Me encanta el curro que se pegó mi madre y la pasta que les ha costado. Papás, os quiero mucho aunque por el camino hasta mi regalo haya tenido que tropezar muchas veces (sobre todo con los escalones para llegar hasta el primer piso xD). Además, hoy recibí el regalo de mis primos y mi tía, una pulsera súper chula y un bolso. Y me falta recoger el de Raquel todavía (sorry, mi niña).

Y nada, ya está bien por hoy. Un beso. ¡¡Hasta el próximo post!!

Falta un día...

Parece esto la final de algún partido de fútbol. En absoluto. A un día de mi cumple, he recibido ya varios regalos. Y no todos buenos, os lo aseguro... Tuve regalito de Manu, una pulsera preciosa y dos DVDs personalizados, regalito de mi tío, un USB de 4 GB (¡ya era hora!) y me esperan varios más (los papis, los tíos, Kelly, Tamara...), gracias a todos. Estoy muy contenta con los regalos, de veras, me emociona recibirlos (aunque vuelvo a repetir que no hace falta nada, por mucho que algunos como Raquel, Laura o Manu se empeñen en que les entre por un oído y les salga por el otro…).

Pero también, como ya dije recibí un regalo por adelante que no es nada bueno… Toda mi clase ha suspendido el examen de castellano sobre la Ilustración y el Romanticismo. De las tres clases (unas sesenta personas), sólo ha aprobado una persona con un cinco… y digo yo, dejando a parte a éste, ¿no es el profesor quien falla si todos los alumnos caen? Grrr… me pone negra este tío.

En fin, dejémoslo. Es cierto que los regalos materiales son un placer recibirlos, y más si quien te lo da te importa, pero creo que lo que me hará más ilusión serán las llamadas. Espero algunas seguro y mensajes de aquellos que no quieran dejarse la pasta, ¡jaja! Seguro que mañana resulto sorprendida porque fijo que alguien que no espero llama o me mensajea. De todos modos, ya os contaré.

Por otra parte, no sé qué hacer. El año pasado dije que no iba a hacer nada este año por mi cumple. Puede que no haga nada, que simplemente le diga a Tamara que pase la noche en mi casa, o mejor, nos iremos al “Barracuda”, que me gustó muchísimo el domingo pasado (la primera vez que yo estaba allí y donde conocí a un chico súper interesante). Es que claro, es muy chungo porque el viernes por la noche es la presentación y viene mi prima Lorena, el sábado es la presentación de los chiquitines y quiero verla y mis papis y yo queremos celebrar el cumple, y el domingo igual vienen mis tíos… ¡uff!

Yo me iría a una discoteca si supiera que con unos taconazos y un buen escote me iban a dejar entrar… pero como no lo sé… además, si vamos a una “light”, iríamos a “Avantgarde”, pero me niego a encontrarme con una sarta de “criajos” maniseros, que ya los tengo bastante aborrecidos. Le pediría a Iris que me diera el teléfono del RR.PP. de “Pachá” o llamaría a David, el RR.PP. de “Queen”, pero me parece egoísta. Si nos fuéramos al “Bueno Bueno” nos vamos a agobiar… me veo celebrando el cumple de Tamara y el mío juntos en el “Circus Maximus” cuando vuelvan a Valencia xD. Al menos me lo pasaría bien, ¡jaja!

Finalizo diciendo que a todo aquel interesado en verme vestida de fallera, si es directo os invito a venir este viernes a verme o si es por foto, pedídmelas =) . Por cierto, ¡Raquel, eres una artista, me encantó el montaje de Gale Harold y mío! ¿Lo cuelgo yo en FanArts? O… no, no, cuélgalo tú, que para eso eres la autora. (“Luv ya, baby!”).

Un beso. ¡¡Hasta pronto!!

Que tardé en aprender a olvidarlo 19 y 500 noches...

Y más, porque no pienso olvidarlo nunca. Ya tenía la idea, pero por si acaso no le hacía gracia, siempre me había abstenido de planteárselo. Leo, ya no te libras, ¡jaja!

Esther:

Esther, qué lindo amanecer...
perdiendo por la noche la inocencia
tanto amor, tanto querer
sale el sol, cuando sonríes, por Valencia...

Esther, qué cuerpo de mujer...
las estrellas no se hablan conmigo
están celosas, no saben perder
desde que sólo sueño contigo...

Esther, laberinto de rosas...
tu placer, tu simpatía, tus secretos
cómo pueden caber tantas cosas
en tu pequeña caja de sueños...

De este poema eres la razón
No hinques el diente en la herida,
a ti, que metes goles en el corazón
no olvides, que te quiero... ¡Amiga!

Esther, no dejes de crecer...
el cielo está muy alto para mí
yo me dedico a envejecer
tu, a la flauta de Hamelin...

Esther, caramelo sin envolver...
no soy un hombre de palabra
estoy como una cabra, ¿qué hacer?
I am a crazy forever...

Esther, no esperes leer...
un gran poema de mí
no soy Gustavo Adolfo Bécquer
sólo escribo, pensando en ti...

Pero Esther, ardilla y caparazón...
si convirtieras en oro lo que tocas
te diría toca tu boca con mi boca
porque yo sonrío, con el corazón...

Podría contar muchas cosas sobre Leo. Muchísimas, más de las que puedo recordar, seguro.

En febrero, hará cuatro años que nos conocemos. Son cuatro años de sueños y charlas interminables, de muchos mimos y ningún enfado, de llamadas sorpresa y mails inesperados, de conversaciones sin sentido y conversaciones de temas trascendentales en la sociedad. Cuatro años de compartir poesías y chistes, cuatro años en los que hemos ido forjando una amistad que ambos esperamos no romper nunca.

Podría deciros que es una persona maravillosa, que me ha cuidado mucho y se ha cuidado mucho de hacerme daño, porque lo único que me ha hecho, es feliz. Leo es alguien en quien puedo confiar y que me abriría las puertas del cielo si se lo pidiera. Sabe escuchar y sabe animar, Leo es una persona sensible que alegra el día a cualquiera, y sabe qué decir y en qué momento decirlo.

Cuando hablamos de él, hablamos de un gran cantautor y poeta que logra transformar las palabras en sentimientos de una manera fantástica. Gran amante de Sabina y Calamaro, comparte conmigo muchos gustos y aficiones y una pasión por la poesía que va más allá de la mente y se cuela en el corazón.

Argentino afincado en Cataluña, logra cautivar corazones sin piedad. Le gusta la fiesta, ¿por qué no reconocerlo?, pero más ama el amor. Enamorado de este precioso sentimiento, según confesó recientemente en su genial blog aunque ya lo sabía (aquí), es un apasionado de la música, y aunque todavía no lo he oído cantar (me debes una, principito), tiene una voz aterciopelada, que junto a la letra de sus canciones, es una maravilla cuando se funden.

Es gracias a él que he continuado escribiendo y es gracias a él que, de repente, me vuelve la inspiración. Y es un ejemplo este poema (aunque sea una tontería enorme), que me salió del alma mientras leía uno de sus posts en su blog, “Hotel Rivera”.

Brindemos:

Brindo por todo lo que dijiste,
en especial por Barcelona, por Buenafuente,
por Sabina y Calamaro,
y por María Jiménez.

Por el amor, por los amantes,
esos que aún no se han olvidado,
porque seas muy feliz,
porque todo sea tan fácil, como para solucionarlo cantando...

Brindemos porque te amen con locura,
porque siempre creas en las hadas y nunca pierdas la ilusión,
porque siempre tengas amigos y porque nadie te olvide,
porque nunca se nos acabe la inspiración.

También por la amistad que nos une,
porque te deseo lo mejor,
porque eres mi mejor amigo,
porque aún en la distancia eres mi confesor.

Porque la distancia que nos separa cada vez sea más pequeña,
porque las fronteras se pueden romper,
porque la vida puede ser verdaderamente bella,
por no consumirnos en el ayer.

Y porque no olvides a nadie a quien quieras jamás,
porque me encanta hablar contigo,
porque eres súper especial,
sencillamente, porque somos amigos.

En definitiva, y no me extiendo más porque sólo con recordarlo me emociono, no tengo más que decir que: ¡Te quiero, Leo!